La cura instantanea
- Admin
- 24 sept 2024
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La experiencia clínica revela una fantasía contemporánea: la cura instantánea. Como consumidores impacientes, esperamos que terapias breves resuelvan en seis sesiones lo que la vida ha construido en décadas. La paradoja aparece inmediatamente: buscamos profundidad mientras rechazamos la inmersión necesaria para alcanzarla. El turismo psíquico reemplaza al verdadero viaje interior.
La observación analítica detecta resistencia disfrazada de eficiencia: el deseo de cambio rápido encubre frecuentemente el temor al descubrimiento genuino. El verdadero proceso terapéutico no promete velocidad sino autenticidad; no ofrece atajos sino caminos. La confrontación con lo inconsciente requiere precisamente aquello que la cultura actual desvaloriza: tiempo indeterminado, esfuerzo sostenido, tolerancia a la incertidumbre.
El síntoma contemporáneo se manifiesta como impaciencia crónica: queremos transformación sin proceso, revelación sin trabajo. La verdadera curación, sin embargo, nunca ha seguido la lógica del consumo rápido sino del crecimiento orgánico: cada insight germina a su propio ritmo, inmune a nuestras exigencias de inmediatez.
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